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12/3/14

La Biblia Latinoamericana, un texto que conviene releer al respecto de esta versión fraudulenta.

Este texto sigue siendo actual, en especial porque gran parte de los errores de esta falsa traducción bíblica aún permanecen en las revisiones actuales. Un católico en conciencia no debe acceder a esta Biblia falsa, comunista, tendenciosa, no traducida desde el original o de la Vulgata, con comentarios contrarios al magisterio y peligrosa para la fe.



DECLARACION SOBRE LA BIBLIA LATINOAMERICANA
Conferencia Episcopal Argentina, 1978

A todos cuantos leyeren:

Con la publicación de este “Suplemento” llega a su fin, luego de un proceso más largo de lo esperado, cuando los Obispos Argentinos manifestábamos el 30 de octubre de 1976, acerca de la necesidad de una revisión y complementación de la edición de la Biblia, llamada “para Latinoamérica”, o vulgarmente “Latinoamericana”.

Entregamos por lo mismo al conocimiento público este “Suplemento”, que esperamos, como era la consigna aprobada por la Asamblea Plenaria en aquella oportunidad, permitirá “al lector prudente y adulto manejar” aquella “edición, nacida del deseo de acercar la Palabra de Dios al pueblo, con provecho y sin peligros para su vida interior”.

Por lo tanto, y dando cumplimiento a aquella resolución, declaramos este “Suplemento” obligatorio en todo el ámbito de las Diócesis que comprende la Conferencia Episcopal Argentina, no debiendo, por lo mismo, ni los fieles usar aquella edición de la Santa Biblia sin este Suplemento, ni las librerías que se llamen católicas vender la una sin el otro.

Recordamos además que dicha edición de la Santa Biblia no es apta para el uso litúrgico en ninguna de las iglesias o capillas, ni en ninguna de las ceremonias litúrgicas que se realicen en nuestras jurisdicciones.


RAÚL FRANCISCO Card. PRIMATESTA

Arzobispo de Córdoba
Presidente de la Conferencia Episcopal Argentina

Buenos Aires, 9 de diciembre de 1978.

DECLARACIÓN SOBRE LA LLAMADA “BIBLIA LATINOAMERICANA”

Durante las últimas semanas hemos asistido a una polémica sobre los valores y características de la edición de la Biblia llamada “latinoamericana” o “para Latinoamérica”

Esta polémica alcanzó en los medios periodísticos una publicidad inusitada para temas de naturaleza tan especial como el que está en discusión.

La Conferencia Episcopal Argentina, en su Asamblea anual, ha encarado el estudio del asunto y cree necesario iluminar algunos puntos que se han agitado en las publicaciones de estos días.


1. — Biblia y Magisterio

Tenemos los Obispos la grave obligación de defender el valor supremo de la Palabra de Dios (Conc. Vaticano II, Dei Verbum, nº 1), a cuyo servicio está nuestro magisterio (Dei Verbum, n9 10) y el cual tiene por función conservar íntegramente, interpretar y difundir esa Palabra que encierra el misterio de nuestra Salvación.

La interpretación auténtica de la Sagrada Escritura en la Iglesia es derecho exclusivo del Magisterio jerárquico, y ningún poder, cualquiera sea su motivación, puede interferir en esta fundamental función de los Obispos, maestros de la fe y fieles servidores y custodios de la Palabra de Dios.


2. — Iglesia y Marxismo

También en este tiempo y desde distintos lugares, se ha acusado a los Obispos de cierta complacencia con el marxismo, en sus variadas formas. Con toda la firmeza que procede de nuestra responsabilidad pastoral, los Obispos, una vez más, condenamos inequívocamente la ideología y la praxis marxistas. Al hacerlo, la Iglesia sabe que está por encima de intereses políticos partidistas y que no es instrumento de ninguna cruzada.

Es la concepción marxista del hombre y de la vida la que es intrínsecamente irreconciliable con la fe cristiana. Nosotros creemos vivamente en el Dios personal que el marxismo niega; nosotros defendemos al hombre hijo de Dios, llamado a compartir su gloria, con todos los derechos que emanan de su persona y que el marxismo niega o anula.

Esta afirmación de ningún modo significa la aceptación de formas del capitalismo, condenadas por la Iglesia (Populorum Progressio, n0 26), ni de otras doctrinas que, aunque opuestas al marxismo, en su tiempo llegaron a proscribir el sagrado texto, conscientes de la oposición de la Biblia a sus principios y a su práctica.


3. — Biblia “latinoamericana”

Al referimos concretamente al problema de la Biblia “latinoamericana”, debemos, ante todo, distinguir claramente la Biblia misma, en cuanto tal, de sus distintas versiones y ediciones.

Aquélla tiene a Dios mismo como autor, y todos los libros del Antiguo y Nuevo Testamento, en todas sus partes, son sagrados y canónicos, en cuanto escritos por inspiración del Espíritu Santo (Dei Verbum, nº 11), y, en cambio, las versiones son susceptibles de deficiencias y, en todo caso, siempre son perfectibles como toda obra humana.

a) En lo que se refiere a su texto y traducción, consideramos, conforme al dictamen de los numerosos expertos consultados, que es sustancialmente fiel, a pesar de algunas objeciones que podrían hacérsele.

b) Las introducciones y notas que acompañan al texto son de diverso valor, y si bien encontramos notas explicativas que, con fidelidad y respeto, adaptan, al lector menos culto, verdades de la fe, otras, en cambio, son ambiguas, no están exentas de peligros y, algunas, referidas especialmente a la Iglesia, por su carácter desorientador, son ciertamente inaceptables.

e) Las ilustraciones, en número considerable, y teniendo en cuenta las ediciones en conjunto, señalan una línea temporalista, por lo menos equívoca, y dos de ellas merecen nuestra desaprobación por su carácter inapropiado e inconveniente, no alcanzando a desvirtuar esta connotación las leyendas que las acompañan.


4.— Suplemento obligatorio

Todo lo expuesto acontece en la llamada Biblia “latinoamericana” o “pastoral”, dándole muchas veces un carácter conflictivo y polémico que explica, en parte, la diversidad de opiniones que se han vertido acerca de ella.

Por eso, los Obispos argentinos afirmamos la necesidad de una revisión y complementación, que supere los elementos discutibles y logre salvar sus muchos aspectos positivos.

Por ello, cuanto antes, se promoverá la edición de un suplemento obligatorio para Argentina, que aclare esta situación, iniciando un diálogo, en cuanto convenga, con otros hermanos de los Episcopados de América, y estando en estrecha comunicación con los organismos pertinentes de la Sede Apostólica.

Este suplemento permitirá al lector prudente y adulto manejar esta edición, nacida del deseo de acercar la Palabra de Dios al pueblo, con provecho y sin peligros para su vida Interior.


5. — Exhortación al uso de la Sagrada Escritura

Mientras tanto, reiteramos nuestro deseo de que la Sagrada Escritura sea cada día más leída y meditada por nuestros fieles, en Iglesia y con sentido de Iglesia, “para que así adquieran la ciencia suprema de Jesucristo , ya que desconocer la Escritura, es desconocer a Cristo” (Dei Verbum, n0 25).

Estén seguros de que en ella encontrarán los caminos para superar toda división, todo enfrentamiento, tal como lo experimentamos nosotros, los Obispos, quienes, por medio de la oración asidua, del humilde reconocimiento de nuestras faltas y dejándonos penetrar por el Espíritu, que nos da la verdadera libertad interior, hemos hallado en la Biblia, en su lectura serena y meditada, la unidad, la concordia, la paz, como frutos inmediatos de ese mismo Espíritu Inspirador.


CONFERENCIA EPISCOPAL ARGENTINA

XXXIV Asamblea Plenaria

San Miguel, 30 de octubre de 1976

SUPLEMENTO OBLIGATORIO

ADVERTENCIA DEL EDITOR

La Biblia Latinoamericana ha tenido varias ediciones y conoce dos formatos; uno de ellos es el manual, sobre cuya cuarta edición se elaboro el suplemento obligatorio promovido por la XXXIV Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Argentina. El otro de los formatos, el así llamado tamaño grande, es el que quizás haya alcanzado mayor difusión en nuestro país. Por otra parte, el Nuevo Testamento de esta Biblia también conoció, separadamente, varias ediciones, con diversas láminas y, en general, acompañadas por una selección de los salmos.

Destacamos por último nuestro meticuloso respeto por las características de puntuación y redacción de los comentarlos originales; así lo hicieron los autores de este suplemento. Con todo, téngase en cuenta que en este aspecto la Biblia Latinoamericana no es siempre feliz y en los casos en que un giro de redacción afecta gravemente la gramática y amenaza la comprensión del sentido, nos hemos tomado la libertad de indicar la palabra o expresión que parece incorrecta, señalándola, como es habitual, mediante la palabra latina sic.

Es interesante advertir que las diversas ediciones de la Biblia Latinoamericana a las que nos estamos refiriendo —y para el caso la edición manual puede ser considerada doblemente una edición distinta— no coinciden necesariamente en su paginación; antes bien, rara vez lo hacen. Incluso parece que entre una y otra edición —así como entre uno y otro formato— los autores han retocado, añadido y suprimido párrafos de sus comentarios.

Por ello, atentos a las necesidades de los lectores, hemos agregado, precedido de un asterisco (*) , el número de páginas de la sexta edición (tamaño grande) de 1974; seguidamente, incluimos la mención del capitulo, capitulo y versículo o versículos, capítulos, perícopas, fragmento, grupo de libros sagrados, nota, introducción, página especial o lámina que la llamada a pie de pagina cubre en estas ediciones de la Biblia Latinoamericana. Cuando el suplemento se refiere a las introducciones o páginas especiales (a las que hemos inicialado PE) y no al comentario del texto bíblico, damos el titulo que los autores del comentario eligieron en cada caso particular y, ante su ausencia, hacemos referencia entre corchetes al párrafo comentado, de acuerdo al dictado del sentido común. A su vez, el asterisco encerrado entre corchetes señala la inexistencia de la nota comentada en la edición de tamaño grande. Cuando resulta necesario, hacemos alguna otra observación que juzgamos imprescindible para el manejo cómodo y fructuoso de este suplemento.

Finalmente, queremos señalar que la selección de láminas difiere ligeramente entre los distintos formatos y también entre las sucesivas ediciones.

De tal manera, le referencia P. 809-810, 751-752, Job 2, 11-3, 26 significará que el poseedor de la edición manual (IV edición, 1974) encontrará el comentario mencionado en las páginas 809-810 de su ejemplar; el lector que tenga en sus manos una edición del tamaño grande (vi edición, 1974), lo hallará en las páginas 751-752 de su libro, mientras que quien tenga en su poder cualquier otra edición de la Biblia Latinoamericana podrá consultar el pasaje bíblico que se menciona y comprobar de tal modo la existencia o inexistencia del comentario señalado.

Adviértase asimismo que la numeración de las páginas de estas IV edición manual y VI edición de tamaño grande no es corrida y se Interrumpe y recomienza desde el número uno (1) a partir del inicio del Nuevo Testamento: lo indicamos mediante las iniciales NT, pospuestas a los números de las páginas citadas. No sucedía así en anteriores ediciones, donde, por otra parte, los editores añadían una numeración propia y corrida de los comentarios del texto, que más tarde desapareció.


INTRODUCCIÓN

El Episcopado Argentino en su declaración del 30 de octubre de 1976, sobre la “Biblia Latinoamericana”, decía:


“a) En lo que se refiere a tu texto y traducción, consideramos, conforme al dictamen de los numerosos expertos consultados, que es sustancialmente fiel, a pesar de algunas objeciones, que podrían hacérsele.

“b) Las introducciones y notas que acompañan al texto son de diverso valor y, si bien encontramos notas explicativas que, con fidelidad y respeto, adaptan al lector menos culto verdades de la fe, otras, en cambio, son ambiguas, no están exentas de peligros y, algunas, referidas especialmente a la Iglesia, por su carácter desorientador, son ciertamente inaceptables.

“c) Las ilustraciones, en número considerable, y teniendo en cuenta las ediciones en conjunto, señalan una línea temporalista, por los menos equívoca, y dos de ellas merecen nuestra desaprobación por su carácter inapropiado e inconveniente, no alcanzando a desvirtuar esta connotación las leyendas que las acompañan.

“Todo lo expuesto acontece en la llamada Biblia “latinoamericana” o “pastoral”, dándole muchas veces un carácter conflictivo y polémico que explica, en parte, la diversidad de opiniones que se han vertido acerca de ella.

“Por eso, los Obispos argentinos afirmamos la necesidad de una revisión y complementación, que supere los elementos discutibles y logre salvar sus muchos aspectos positivos.

“Por ello, cuanto antes, se promoverá la edición de un suplemento obligatorio para Argentina, que aclare esta situación, iniciando un diálogo, en cuanto convenga, con otros hermanos de los Episcopados de América, y estando en estrecha comunicación con los organismos pertinentes de la Sede Apostólica.

“Este suplemento permitirá al lector prudente y adulto manejar esta edición, nacida del deseo de acercar la Palabra de Dios al pueblo, con provecho y sin peligros para su vida interior.”

Posteriormente, el 25 de febrero de 1977, el Cardenal Villot, Prefecto del Consejo para los Asuntos Públicos de la Iglesia, con Oficio N9 1031/77, remitió las conclusiones a las que había llegado la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe sobre esta Biblia Latinoamericana:

“La Congregación para la Doctrina de la Fe, aun considerando que en la llamada Biblia Latinoamericana la traducción de los textos originales sea fiel, es del parecer que las ambigüedades y las imprecisiones de las introducciones y de las notas deben ser eliminadas o aclaradas por la Jerarquía local y, además, que deben ser consideradas tendenciosas, y por tanto deben ser eliminadas, algunas fotografías, por ejemplo: la de los rascacielos de Nueva York con la respectiva descripción: ‘Ven que te mostraré la Ciudad Grande. Todos se han prostituido en ella...’; la de la plaza comunista de La Habana con la correspondiente descripción: ‘El creyente participa en la vida política...’; la de los oprimidos latinoamericanos con la descripción: ‘La Biblia tuvo comienzo con la liberación de una esclavitud’.”

Cumpliendo, pues, con lo prometido, se presentan ahora estos comentarios aclaratorios de las notas que puedan prestarse a errores o aplicaciones desacertadas.


Valores y ventajas

Se podrá apreciar que muchos párrafos objetables encuentran su contrapeso equilibrante en otros pasajes de esta misma Biblia especialmente editada para Latinoamérica. Ello demuestra que el arduo trabajo pastoral y exegético realizado por los autores contiene en sí mismo los anticuerpos que pueden inmunizar al lector católico frente a las frases apuradas, poco pulidas y disonantes con el conjunto. Repetidas veces, pues, este suplemento no hará más que facilitar la lectura fructuosa de la Biblia, remitiendo a su total contexto y a las mismas explicaciones contenidas en esta publicación.

No es de extrañar que los valores propios de esta edición se encuentren mezclados con material no tan perfecto. Los Obispos argentinos en su comunicado del pasado mes de octubre recordaban: “Las versiones [de la Biblia] son susceptibles de deficiencias y, en todo caso, siempre perfectibles como toda obra humana.”

Ya los mismos editores se dirigían a sus lectores, pidiendo “a cuantos lean esta Biblia, que nos escriban con absoluta confianza, seguros de que su aporte será tomado muy en cuenta y contribuirá, sin duda, a mejorar tanto la traducción como las notas explicativas” (III edición, 1972).

Con espíritu de servicio al vasto público que esta Biblia ha ido conquistando y en cumplimiento de su función de magisterio para el bien del Pueblo de Dios, el Episcopado argentino ofrece a los fieles de nuestra Iglesia Católica los “necesarios y útiles mejoramientos”, con la preocupación pastoral de que lugares aislados y poco felices no dañen “las ventajas ampliamente reconocidas” que conserva esta edición, según indica la mencionada carta del cardenal Villot.


Método utilizado

En vez de hacer un recorrido página por página a través de los textos bíblicos, se irán agrupando bajo un mismo apartado los lugares preocupantes que tienen afinidad entre sí por el tema o la tendencia que manifiestan.


Proponemos los siguientes:

1. Criterios adoptados para los diversos tipos de letra

2. Dios

3. Dios, el mal, la libertad humana

4. Colaboración de Dios y del hombre

5. Apariciones e intervenciones divinas en la historia

6. Relaciones entre el Antiguo y Nuevo Testamento

7. Profetas en el Antiguo y Nuevo Testamento

8. Israel y la Iglesia

9. La ley y la libertad

10. El Bautismo comparado con los ritos de la Antigua Ley

11. Fe y doctrina

12. Más allá de conservadores y progresistas

13. Justicia social y religión

14. Culto y vida

15. Religiosidad popular

16. Concepto de liberación

17. Visión de la historia

18. Inexactitudes y errores tipográficos

19. Fotos

Sin embargo, para facilitar la ubicación de los párrafos observados, añadimos al final un índice de los mismos, citando el lugar en que son corregidos o comentados. Queremos dejar constancia también de que en las diversas ediciones ha habido cambios, que son de dos tipos: por una parte, fueron corregidas explicaciones imperfectas: pero, por otra, se introdujeron párrafos objetables, que no existían en las versiones anteriores. Quede asentado, por consiguiente, que las presentes observaciones se basan en la edición (de bolsillo) de 1974, de la que se dice en la página de presentación: “Texto íntegro - Nueva edición - Traducción y comentarios revisados y mejorados”.


En la décima edición

Estando ya terminada la elaboración de estas notas y observaciones, llegó a nuestras manos un ejemplar de la X edición, de 1976, de la “Nueva Biblia Latinoamericana donde se ha deslizado un gravísimo error dogmático: P. 5 (NT): “No cabe lugar para dos padres [para Jesús], porque Jesús, que nace de Maria como persona humana, es el Hijo Único del Padre, nacido de Dios desde la eternidad.”

P. 84 (NT): “El día en que [Jesús] resucite de entre los muertos, su persona humana será renovada, ampliada, llena de energías diversas.”

Está solemnemente definido en los primeros Concilios Ecuménicos de la Iglesia que Jesús tiene una sola persona: la divina, y posee dos naturalezas: la divina y la humana. Afirmar otra cosa sería caer en una de las herejías más graves y antiguas sobre Cristo.

3/10/13

La Biblia didáctica, otra falsa versión de la Biblia


Esta biblia esta basada en la traducción pastoral de la Casa de la Biblia llamada ´Biblia de América´ que en cierta manera la han querido poner de competencia con la Biblia Latinoaméricana, ambas modernistas, me consta por testimonios de la mitra de la ciudad de México.

Lo que tiene esta Biblia es algo curioso y pocos lo saben.  El texto esta ´mochado´, recortado.  A pesar de que el Nuevo Testamento aparece completo en el Antiguo Testamento hay ´recortes´: no están todos los salmos, no están todos los capítulos,  hay capítulos incompletos. Es una Biblia mutilada.

Eso si... esta ilustrada con muchos "dibujitos" al principio y al final. No vale la pena tener este texto ni siquiera por las bellas ilustraciones a color y la presentación versátil del ejemplar.

Luego hablaremos mas a fondo de la ´Biblia de América´ y las objeciones a la traducción modernista que presentan al pueblo católico.

Saludos.

10/9/13

La lectura Jehová en la tradición católica, mas controversia en torno al nombre.




5 lecturas provenientes del Latín como interpretación del nombre divino Yhwh.

Regresamos nuevamente a la controversia del nombre divino y su uso en la tradición católica occidental. Ya sabemos que la lectura Jehová (oJehovah o incluso la mas correcta en latín IEHOVAH) es falsa y que comenzó a utilizarse mas de diez siglos después de Cristo. Surgio como Iehovah, debido a que este nombre esta escrito en caracteres latinos y no hebreos. Y al menos los que conocen un poco de latín saben que en el alfabeto latino no existe ni la J, ni la Y ni la W.

Varias personas, fanatizada con la letra y olvidando el espíritu de las Sagradas Escrituras,  nos atacan a los católicos por no usar el nombre de Dios. Si la Iglesia no lo usa en su liturgia o en su vocabulario diario es porque se sigue la tradición judía que conservaron los apóstoles y nos legaron los Padres al utilizar el DÓMINUS en el lugar de YHWH. No hay prueba fehaciente de que Cristo o los apóstoles pronunciaran el nombre divino en su forma dada a Moisés como algo ordinario en su tiempo. He aquí algunos puntos sobre la lectura Jehova en la tradición cristiana:

1. La Iglesia usó, y usa, el Nombre Jehovah pero de manera diferente a como le enarbolan los testigos de Jehova, que ni son testigos ni son de Jehova. Si se ponen a investigar son apenas un refrito de la "moda" norteamericana de sectas antitrinitarias del siglo XIX. Eso si, a la Watch Towe le funciono el negocio y ahora es una secta en apogeo.

2.  Actualmente se prefiere la traducción Yahweh o sus variantes Yahveh (Como Bóver-Cantera y la antigua Biblia de Jerusalén), Yahvé (Como propone Straubinger) o simplemente Yavé (Nácar-Colunga).

3. Por una tradición antiquísima, incluso anterior a Nuestro Señor Jesucristo (que fue seguida por los apóstoles, los primeros cristianos y los Padres) se lee la traducción  del hebreo YHWH como Adonai - Kyrios - Dóminus (arameo, griego de la Biblia de los LXX's y  latín de la Biblia Vulgata) que se traduce como EL SEÑOR.  Esta tradición milenaria y de respeto al Nombre divino (Hashem en hebreo)  es atacada ferozmente por las sectas fundamentalistas, como la arriba citada de los Testigos, a las cuales no hay caso rebatir debido a su obstinación y fanatismo de enfoque. Se quedan en la letra y no viven el espíritu.

4. A pesar de usar actualmente el nombre Yahveh o sus variantes en las traducciones modernas de la Biblia, la Iglesia utilizó en himnos, estudios bíblicos y litúrgicos hasta ya entrado el siglo XX el nombre de Jehová como el propio de Dios. Esto se debe a que este nombre fue un intento por pronunciar en LATÍN el nombre inefable de Dios, aunque actualmente se sabe que tal nombre surgió por una creatividad bien intencionada al mezclar el tetragrama YHWH (En latín IHVH) con las vocales de Eloah, que es una variante de Adonai. Asi surgio Iehovah.  La J es un añadido de siglos posteriores.

5. Algunos himnos tradicionales en castellano conservan el nombre Jehová
Estos son los links para comprobarlo:
"Los cielos, la tierra
y el mismo Jehová,
aclaman Señora,
tu gloria sin par.
Ave, Ave, Ave María"


Pastores, no os llenéis de espanto;

Una feliz noticia os doy;
Nuestro Jehová, que os ama tanto,
Es vuestro Redentor desde hoy


6. En algunas películas mexicanas puede verse como  en la Iglesia católica era usado el nombre de Dios como Jehová.
 Los Tres Huastecos con Pedro Infante, en el momento en que se esta dando catecismo a los niños.
Jesús Nuestro Señor , durante Jesús perdido y hallado en el Templo.
Los Tres Reyes Magos, que fue la primera caricatura, se dice Jehovácuando el rey Herodes hace rimas viendo como atacar al Niño Jesús).

7. En antiguos catecismos, manuales de liturgia o de teología aparece este nombre como el propio de Dios, recordando que aún no se hacían investigaciones mas profundas como las llevadas a cabo en los siglos XIX y XX. También se encuentra el nombre Jehová  en ornamentos de misa, fachadas de Iglesia, decoración de espacios sagrados, imágenes religiosa, etc.

Algunas muestras del uso católico de Jehová en Antiguas Biblias latinas aquí las presento.

Hoy todo estudiante de la Biblia, serio y bien intencionado, sabe que el nombre Jehová es erróneo, algunos lo siguen usando por tradición (Biblia protestante Reina - Valera).

La Iglesia dejó el usó de Jehová y optó por la lectura Yahveh entrado el siglo XX, quedando rastro del uso antiguo en reliquias de biblioteca o de sacristía. Conviene repetir que para los cristianos el nombre mas excelso de Dios lo reveló Jesús mismo al decir que Dios es PADRE.


 Edición de la Biblia de Petisco ~ Torres Amat. En el texto utiliza la traducción EL SEÑOR, en las notas da a entender que la lectura Jehová es la habitual a inicios del siglo XIX.


Esta es una edición de la Vulgata de 1830. En el resumen del capítulo, no en el texto Sagrado, aparece la lectura Jehovah como aceptada.

Estas fotos corresponden a una iglesia de Guadalajara, se lee Jehová. La iglesia es por mucho anterior a la fundación de la secta rullesita de los Testigos.







15/8/13

Santa Biblia de Evaristo Martín Nieto

 

La Biblia del P. Evaristo Nieto aparece en 1961. Hemos analizado el texto de una de las primeras ediciones y varias de las subsiguientes, en especial las últimas ediciones que aparecen como "Nuestra Sagrada Biblia".  Las primeras ediciones son buenas y con comentarios sanos y sencillos; el texto se caracteriza por ser fiel a los idiomas originales, de fácil comprensión y en castellano correcto. La traducción, en general, es buena y fiel; después de revisarla detenidamente y compararla con textos tradicionales de traducción Hebreo y Griego (Straubinger, Nácar-Colunga, Bóver-Cántera, etc.) se puede acceder al texto sin escrúpulo de error modernista.

Sobre las nuevas ediciones esta Biblia, muy difundida en Suramérica, podemos decir lo siguiente:
  • Texto bueno. No hay muchas variantes en comparaciòn con las primeras ediciones.
  • Aparece con el nombre "Nuestra Sagrada Biblia".
  • La introducción es pésima. Hay que arrancar las hojas 9 a la 14. 
  • Introducciones y pies de página. Pobres, sin contenido doctrinal. Algunas notas son ambiguas o herejes (¡en una se afirma que toda la humanidad somos hijos de Dios!, o sea no hay necesidad del  sacramento del Bautismo).
  • El precio es muy económico en su versión grande o pastoral, e incluso en las pequeñas, y de pasta dura. Hay también ediciones con cantos dorados y con estuche.
  • El texto sigue fielmente el hebreo, usa el castellano correcto y el "VOS"  en lugar de "TU", por ejemplo.
¿Se puede leer y aprovechar esta nueva edición de Evaristo Martín Nieto?

El texto si. Ya que, al igual que las nuevas ediciones de Nácar-Colunga, mantiene el texto fiel salvo los comentarios, notas e introducciones erradas.

Con el favor de Dios espero que un grupo de fieles conocedores de la Biblia revise estas notas y comentarios para hacer un folleto que se anexe a la Biblia aquí mencionada y en el que se precise exactamente cuales son las faltas o errores en las notas. Así mismo se completaran las notas e introducciones para que sean mas doctrinales ya que en genera son vacías.

La Biblia puede leerse sin escrúpulo. El texto, como ya dije, es sano; las introducciones pésimas en las que se habla mucho de la "justicia" sin precisarla y sin relación con el plan salvífico de la Verdad encarnada que es Nuestro Señor Jesucristo.

"Nuestra Sagrada Biblia" o "La Santa Biblia" (Ediciones hechas en España) puede situarse en las Biblias que pueden tolerarse para la lectura pero no para el estudio si no se tiene un anexo que precise las notas e introducciones. Reitero, e texto es muy bueno, fácil de leer, en castellano correcto.


10/8/13

La Biblia "Católica" para Jovenes


Aunque la poseemos, consideramos esta edición como una de las mas peligrosas y que de ninguna manera debe ser utilizada por los fieles católico.
La biblia esta basada en la "Biblia de América" que no es la mejor traducción a pesar que fue una "reacción" para contrarrestar la falsa Biblia Latinoamericana.
No tiene comentarios, solamente "reflexiones" que se alejan del pensamiento católico. En estas reflexiones aparece una en el Antiguo Testamento en la que se presume de manera ambigua una aceptación tácita de las uniones homosexuales, aberración contraria a las Sagradas Escrituras y a la doctrina católica de Siempre.
Esta no es católica, ni en su texto, ni en sus "reflexiones", ni en su presentación. A pesar de ser presentada como católica y con un diseño atractivo, jovial  y dinámico, contiene veneno de la falsa doctrina.
Una vez arreglando mi escanner publicaré el texto de la reflexión a la que me refiero como contraria a la fe.

Ricardo.

30/5/13

La Sagrada Biblia, P. Serafín de Ausejo OFM Cap. Ed. Herder


Nos toca ahora comentar acerca de la Biblia del Padre Capuchino Serafín de Ausejo de Editorial Herder. Es una Biblia popular salida en los 60´s  de escasas notas pastorales. En formato bolsillo y de prácticamente imposible búsqueda de capitulos y versiculos.

Es de una letra muy pequeña, díficil de leer si no se tiene buena visión.

Para la lectura devota y la lectio divina puede usarse esta versión de la Sagrada Escritura sin problema.  

Aún pueden conseguirse esta biblia. Herder ha reeditado esta Biblia en formato de mayor facilidad de busqueda y de lectura. Esta edición no la he revisado con la original de los 60´s.



16/5/13

La Sagrada Biblia, del Padre Agustín Magaña Méndez


Seguramente en Méxicomuchos conocerán esta Biblia, eminentemente pastoral, que distribuye ediciones paulinas a un precio accesible y en diferentes presentaciones. Es la primera Biblia mexicana traducida directamente del griego obra del padre Agustín Magaña Méndez (1887-1983), destacado biblista y erudito michoacano.

Es una edición muy popular y distribuida en México y de las pocas que, a pesar de no ser muy elevadas en su lenguaje por ser para el pueblo, es una opción para el católico que busca una traducción no tendenciosa o con errores de una crítica modernista. La edición tiene pocas notas e introducciones, pero el texto es de fácil comprensión y muy útil para quien se inicia en las Sagradas Escrituras, especialmente niños y comunidades rurales. En mi experiencia de catequesis es de las mejores junto con la Biblia Americana San Jerónimo para personas que no entienden un lenguaje elevado como la Biblia Straubinger o Nácar - Colunga.

El Nuevo Testamento traducido en 1953 fue publicado por la Sociedad de San Pablo en México y una vez terminada la traducción del Antiguo Testamento, en base al texto griego de la Septuaginta cotejando con versiones modernas, se publicó la Biblia completa en 1975. Actualmente lleva mas de 100 ediciones en diversos formatos. 

La traducción es sencilla, parca en los comentarios e introducciones, de lectura comprensible, por tal razón le llaman pastoral,  es decir no enfocada a estudios bíblicos sino a la gente sencilla o como herramienta de evangelización. 

Los más tradicionalistas pueden usar esta traducción en especial para la catequesis y la lectura popular, no la de estudio. En lo personal, como ya indiqué, la llegue a usar en la catequesis para la lectura grupal. La revisión del año 2002 distorsionó un poco el texto y los comentarios originales, aún así el texto es sano y sigue rectamente las traducciones clásicas pero en lenguaje sencillo, sin caer en lo vulgar.

Se le ha criticado duramente por ser una traducción directa del griego y pobre en erudición, pero al ser una edición para el pueblo se compensa la disonancia de traducción. La traducción del Nuevo Testamento es de más calidad que el Antiguo en cuanto a congruencia con el lenguaje en toda la traducción.

Esta Biblia fue, es, y esperamos siga siendo ayuda en la Evangelización y difusión de la Sagrada Escritura. Su bajo costo, su traducción sencilla y llana además de su difusión ayuda a que continúe siendo de las más editadas en México.


Algunas de las presentaciones mas populares de la "Biblia Magaña" o Biblia Pastoral de Paulinas.

El P. Magaña, junto a Mons. Fulchieri, siendo profesor del seminario de Zamora.


Sepulcro en Tlazazalca, Michoacán


El Nuevo Testamento de P. Magaña

15/5/13

La Biblia de Jerusalén 1967,1975,1998 y 2009


Nos escriben preguntando sobre la Biblia de Jerusalén. En lo personal tengo una experiencia con ella: era un niño cuando comencé a estudiar la Biblia y usaba la latinoamericana hasta que en 1999 ahorre $90 pesos mexicanos para comprar mi Biblia de Jerusalén, se me dijo que la comprara porque después se iba a agotar, y así fue porque en 1998 había aparecido la revisión. 

¿Qué dicen de ella? 

Generalmente se refieren a esta traducción como `la mejor`, incluso los eruditos protestantes la usan. Entre los tradicionalistas la ven con recelo, los conservadores se dejaron guiar por la fama, los más liberales la tachan de ser muy dura, etc... En general se tiene como la mejor Biblia en castellano por su fidelidad a los textos originales y por ser una edición crítica. Al aparecer en los años 60 en español poco a poco fue tomando posicionamiento y prestigio que ya para los años 90´s se decía de ella: la Biblia que se usaba para estudiar, la que usaban en los seminarios, la mejor de las Biblias, etc...  

Independientemente de la posición teológica de los fieles católicos hay que hablar no de la Biblia de Jerusalén, sino de las Biblias de Jerusalén ya que las diferentes revisiones contienen variantes las cuales se pueden cotejar y comprobar que no son la misma. 



Las primeras ediciones.

La Biblia de Jerusalén es la respuesta a las iniciativas del Siervo de Dios Su Santidad Pío XII al respecto de nuevas traducciones en base a los textos originales. Fue elaborada por la escuela Bíblica de Jerusalén y apareció en francés, por fascículos, desde 1948 a 1953.  La edición española es de 1967 y es traducción directa de los originales con las notas de la edición francesa.

Rápidamente comenzó a posicionarse como una edición buena con notas críticas ideal para el estudio. En 1975 fue revisada, manteniendo los parámetros de la primera edición pero volviéndose más crítica en las notas e introducciones.




Llegó para quedarse.

Estas primeras dos ediciones de la Biblia de Jerusalén son lo que podemos llamar la antigua Biblia de Jerusalén, o la clásica, la que se hizo famosa entre católicos y estudiosos bíblicos, incluso de otras religiones, debido a su fidelidad a la traducción y sus notas críticas y explicativas mas que doctrinales o de formación en la fe. En lo personal considero que fue la mejor de las Biblias de Jerusalén, es crítica y tiene mucho parecido con la Bóver - Cantera.  

Al leer la Biblia de Mons. Straubinger  hay versículos que son idénticos en su traducción.  En las notas se ve una clara influencia de la Septuaginta cuando los textos hebreos (y el masóretico) están corrompidos o son de difícil lectura. 

Estas dos ediciones clásicas son fáciles de identificar porque se utiliza el nombre Yahveh como el propio de Dios y en su pasta aparece un pez con la cruz tomado de un relieve de las catacumbas. De ellas se hicieron muchas impresiones en diversos formatos. Uno de ellos en varios tomos con ilustraciones. Tambien se realizaron biblias de bolsillo con escasas notas. y una biblia ´popular´ en papel periodico que no es para nada práctica.




La nueva revisión.

Estando ya posisionada como la  mejor, en 1998 aparece la Biblia de Jerusalén revisada y aumentada, es en esta edición que se revisó el texto y este perdió su erudicción, las notas e introducciones se alejaron de la sana crítica y siguieron el ejemplo de algunas ediciones progresistas. Esta Biblia utiliza el nombre Yahvé como el propio de Dios, de allí que se pueda identificar la variante al igual que cambia el orden de los libros de la Biblia. Lo mas grave es que niga la historicidad bíblica y es confusa en la cuestión de interpretación ortodoxa.

En 2009 aparece la Nueva Biblia de Jerusalén totalmente revisada y aumentada, que revisa el texto y las notas para continuar la linea progresista de las revisiones francesas anteriores. Se hizo una edición especial para América Latina con el lenguaje propio del continente (elimina el vosotros) y reduciendo las notas.




¿Cual es la mejor?  Personalmente me inclino por la primera, pero es imposible de conseguir. ya que aún mantiene las directrices de la sana crítica y los comentarios y notas no rozan en el relativismo o modernismo. La de 1975 no es la mejor pero aún se mantiene en la linea media pero esta edición es díficil de conseguir debido a que ya no se imprime desde 1998, solo en tiendas de libros usados o por suerte se puede volver a obtener.  En cuanto a ediciones críticas la antigua Biblia de Jerusalén, la Bóver - Cantera  y la Iglesias - Pavón son las mejores aunque esta última carezca de aparato crítico y notas pero tiene el texto.





Para latinoamericana

Desconozco porque se hizo famoso el hacer ediciones de la Biblia en castellano ´para Latinoamérica´,  en lo personal no dudo de la buena fe de llevar la Palabra de Dios a todos pero esto llega a rozar en lo torpe al pensar que todos en América no somos capaces de hablar español.  La principal caractéristica del es eliminar el vosotros por el usted, aunque hay dificultad con el TU pues al Dios se le ´tutea´, cosa que no esta mal ya que en la Vulgata aparece igualmente. La diferencia es cuestione meramente cultural de distinguir entre Usted y Tu, al alejarse del Vos.  

Estas ediciones también recortan las notas y el aparato crítico. La cereza del pastel es la Virgen de Guadalupe que debe de aparecer si o si. 

La Biblia de Jerusalén latinoamericana fue producto de una revisión a cargo de bíblistas mexicanos de la Universidad Pontificia de México en colaboración con españoles y colombianos. Siguió editandóse en España hasta que hace poco el precio se hizo accesible con la edición de Buena Prensa y la mas novel en papel reciclado en rústica. Esta edición tiene el texto mejor que la Biblia Pastoral (Latinoaméricana) o la Biblia de América, las notas no son doctrinales y escasas pero no es tradicional. Aún así cumple su propósito de poner la Biblia al alcance de los hispanohablantes de América.

Acceda a nuestra página de descargas para bajar gratis la Biblia de Jerusalén

22/4/13

La Sagrada Biblia Bóver - Cantera pdf gratis




La Sagrada Biblia traducida por José María Bover, SJ  y por Francisco Cantera salió a la luz en 1947. Fue publicada por la B. A. C. pero no se ha reeditado desde hace años.
Fue revisada por el P. Félix Puzo, S. J. eminente bíblista y colaborador del P. Bóver.
Se considera la primera edición crítica católica en castellano de las Sagradas Escrituras en base a los textos Hebreo, griego y Latín y aún sigue siendo apreciada por muchos debido a su excelente calidad de traducción.
Actualmente la Biblia de Jerusalén 1967, es considerada de las mejores ediciones críticas, pero para los que le tienen un poco de miedo a la Biblia de Jerusalén pre 1998 recomendamos la Biblia Cántera-Iglesias, la cual es netamente de estudio y no tanto para pastoral, catequesis o para la lectio divina, por lo cual no es recomendable que este al alcance de cualquiera ya que es exclusiva para estudiosos. En otros casos están las biblias pastorales.



La B.A.C. ya no edita esta versión.  Si alguien consigue un ejemplar, ha encontrado un tesoro.




21/1/13

Biblia Torres Amat de Editorial Stampley


La Biblia Torres Amat editada por STAMPLEY repite el texto integro del Siglo XIX pero con mucho es la mejor de las reproducciones debido a que el español ya no es arcaico sino revisado. A pesar de este gran logro aun aparecen las "viruelas" o parafrasis que el traductor colocó dentro del texto como explicación. El hecho de que también los capítulos se conserven en números romanos no da una impresión favorable.

No solo Stampley la ha editado, otras editoriales reproducen este texto revisado, al menos en gramática contemporánea. Generalmente se consigue esta Biblia en formato familiar pero también hay en tamaño pastoral o popular.

Quien desea un texto ameno de Torres Amat, con notas y comentarios íntegros  incluso con las viruelas, esta es la mejor Biblia. Aparte de que trae Una introducción general, mapas, glosario al final y hermosas ilustraciones.




Porqué aparece el nombre “Jehová” en la Biblia de Félix Torres Amat


Hay quienes han preguntado porqué una traducción de la Sagrada Biblia tan antigua y tradicional como lo es la popular ´´Torres Amat´´ (o mejor Petisco - Torres Amat) coloque como nombre propio de Dios la lectura Jehovah y no Yahveh, Yahvé o Yavécomo lo hacen una parte de las traducciones católicas modernas. Espero exponer aquí de manera sencilla las razones por las cuales este nombre incorrecto fue usado en otro tiempo por la Iglesia sin escrúpulo pero que después se adoptó una lectura mas correcta que es la que actualmente utilizamos.


1.  El nombre Jehová en la Biblia Torres Amat no fue añadido por los russellistas.

Muchos católicos piensan que es una interpolación hecha por los Testigos de Jehová. Es falso.  La Iglesia usaba el nombre Jehovah años antes de que los russellistas empezaran a usarlo como refrito.

Lamentablemente una  edición mexicana de Torres Amat, en el glosario final, comete el error de publicar: Los testigos de Jehová lo enarbolan como el nombre único. En el texto de esta Biblia de Torres Amat aparece este nombre falso de Jehová tres veces, interpolado, sin duda, por algún infiltrado hereje.

Tal aseveración es ridícula ya que la traducción de Torres Amat es de 1823, años antes de que Charles T. Russell fundara a los Estudiantes de la Biblia y casi cien años antes de que los llamados Testigos de Jehová comenzaran a utilizar de bandera el nombre Jehová a ultranza.

2. Jehová, transcripción latina erronea de Yhwh.

¿A qué se debe pues que aparezca este nombre en antiguas Biblias católicas?

El nombre divino lo constituyen cuatro consonantes Y H W H (יהוה),  que son impronunciables por carecer de vocales. Los judíos después del exilio babilónico olvidaron la pronunciación correcta y en su lugar, aún en la actualidad más de 2000 años después, le sustituyen por Adonai (Mi Señor) o Hasshem (El Nombre).

La Iglesia ha seguido la tradición judía de usar con respeto el nombre de Dios siguiendo los criterios de la Biblia judía de los LXX´s que en Griego traduce Kyrios, El Señor.  Esta Biblia la usaron los apóstoles y los primeros cristianos. La Biblia Vulgata de San Jerónimo traduce Dóminus (El Señor) según la costumbre hebrea y en ocasiones Adonai.

La pronunciación de Yhwh se perdió y los judíos medievales hicieron juegos de palabras para vocalizar las consonantes sagradas. Así agregaron a estas 4 letras consonantes las vocales de Eloah (אלוח), que es una de las palabras hebreas para designar a Dios. Pero como en latín no existe la Y (letra Yod hebrea) ni la W (letra Waw hebrea) se usaron la I  y la V.   De esta manera nació en la Edad Media el Nombre:

 IEOHVAH

Los éruditos cristianos versados en lenguas bíblicas lo tomaron como cierto y así la primera vez que aparece el nombre Jehová en un escrito  es en el libro Pugio fidei Christianae del dominico Ramón Martín, el cual era versado en las lenguas orientales.

En el siglo XV apareció la letra J gracias al grámatico italiano Gian Giorgio Trissino y desde entonces se lee Jehová. Algunas ediciones de la Vulgata Latina que en sus epígrafes (pequeños resúmenes de cada capítulo) aparece la lectura Iehovah.

Este es el nombre de Dios que uso la Iglesia Católica antes de los estudios mas profundos del siglo XX que dudaron de la veracidad de esta traducción latina del nombre hebreo de Dios. Parecerá raro pero es la verdad. Desde el siglo XII aproximadamente la Iglesia adopto este nombre en algunos manuales de teología y de liturgia hasta la primera parte del siglo XX en que se erradicó para usarse la lectura Yahvé, que es la más próxima a la antigua pronunciación hebrea del santo nombre. La Biblia Nácar Colunga fue la primera biblia en español en usar la palabra Yavé alejandose de la transcripción Jehová.

En el arte y en la música la Iglesia utilizó este nombre pero con los nuevos aportes de investigación bíblica se optó luego por el nombre Yahweh o sus variantes Yahveh, Yahvé o Yavé. A raíz de esta adopción por parte de eruditos católicos se identificó la lectura Jehová como propia de los protestantes (por aparecer este nombre en la Reina – Valera) y más específicamente por los Testigos de Jehová pero esta identificación es mas por costumbre.

El nombre en si no tiene nada de malo, pero es incorrecto y la lectura Yahveh es la más cercana a YHWH, que en latín se leen Ihvh por no existir la Y ni la W en el abecedario como arriba se explicó.

Las nuevas ediciones de la Torres Amat tienden a sustituir Jehová por Yahvé. Aclaramos que Torres Amat no puso Jehováh en el texto bíblico, sino en las notas, los epígrafes y las paráfrasis (añadidos dentro del texto pero con itálicas a fin de explicar mejor el sentido).


Iglesia de St. Martinskirche Olten, Suiza.


Lugares en la Biblia Torres Amat donde aparece la palabra Jehovah.

Éxodo 6.  En el epígrafe: “…le revela su nombre Jehovah”.
Éxodo 6. Nota del versículo 4: “En hebreo se lee Mi nombre Jehovah…”.
Éxodo 33 Nota del versículo 20: “…su inefable y propio nombre de Jehovah”.
Éxodo 34 Nota del versículo 6: “…pronuncio el nombre de Jehovah”.
IV de Reyes (II Reyes) 33 Nota del versículo 17: “En el texto hebreo se lee a Jehovah”.
Judith 16,3 como paráfrasis.
Salmo 67, 5 como paráfrasis.
Salmo 82, 19 como paráfrasis y en la nota.
Salmo 93, 1 como paráfrasis.
Salmo 99, 3 como paráfrasis.
Salmo 109. En la nota aparece tres veces.
Isaías 42, 8 como paráfrasis.
Jeremías 23, En la nota aparece dos veces.
Jeremías 33,  2 como paráfrasis.
En la introducción a los libros de los Macabeos aparece dos veces.


Salmo 82, 19 en Torres Amat. Puede verse que el Nombre Jehovah esta en itálica, o sea es una paráfrasis o explicación del texto. Lamentablemente los Testigos de Jehová usan este texto de Torres Amat para confundir a los fieles.


Aparte debe decirse que en la edición publicada por Revista Católica de El Paso, TX en los años 20´s e incluso hasta los 40´s  aparece más veces el nombre Jehová en las introducciones y notas pastorales.

Por tanto debe desmentirse que la adición de la lectura Jehovah en Torres Amat sea un añadido por parte de alguna secta. También recordar que este nombre aplicado a Dios no es de uso exclusivo de Reina-Valera o de algún grupo religioso aunque en la práctica, salvo excepciones, si aplica.

La Iglesia ha optado por la traducción Yahveh o sus variantes como mas fiel a la lectura hebrea así las Biblias en castellano desde Nácar - Colunga han impuesto esta lectura ya popular en los sectores bíblicos católicos.

Los Testigos de Jehová pregonan que ellos exaltan el nombre de Jehová sin darse cuenta que la primera vez que aparece en la historia es en un texto católico del siglo XIII.

Alfonso Ramos



Le recomendamos leer nuestros posts respecto al nombre incorrecto Jehová:

La lectura Jehová en la tradición católica:

El nombre de Dios en la Biblia católica

Los Católicos y Jehová: El Padre Nuestro


 El nombre de Jehovah, en el vitral de "Jesús perdido y hallado en el templo"  
Iglesia de San Fiacre,  Dison, Bélgica. Nuca se ocultó su uso liturgico y bíblico en la Iglesia.

20/1/13

Sagrada Biblia Nácar - Colunga



La Sagrada  Biblia Nácar - Colunga es la primera version católica española  traducida directamente desde los originales hebreo y griego. Publicada en 1944. Traducida por Eloíno Nácar Fúster y Alberto Colunga Cueto, O.P.. Ha sido editada por la Biblioteca de Autores Cristianos, B.A.C.

Eloíno Nácar Fuster (1870 - 1960) fue Sacerdote español, catedrático y consultor de la Comisión Pontificia Bíblica.

Alberto Colunga y Cueto O.P. (1879 - 1962),  Sacerdote dominico español, catedrático y consultor de la Comisión Pontificia Bíblica. Fue profesor en el Ateneo Pontificio Internacional "Angelicum" de Roma, en el convento de San Esteban y Catedrático de Sagrada Escritura en la Universidad Pontificia de Salamanca.
Miembro honorario de la Academia Teológica Pontificia Romana y consultor en la Comisión Pontificia Bíblica, nombrado por Pío XII.

Las ediciones católicas anteriores habían estado basadas en la Vulgata Latina mismo que algunas cono la Petisco-Torres Amat incluían en sus notas referencias a las variantes de traducción según los textos originales.

Mas de 30 ediciones  avalan su popularidad, la mas actual es del año 2010. Las ediciones han sido presentadas en diversos formatos: en bolsillo, tamaño personal, tamaño pastoral y una grande con ilustraciones de códices medievales.

Los comentarios cambiaron después del Concilio Vaticano II y en algunos se ve un alejamiento de la doctrina católica; a pesar de eso el texto es elegante y con justa razón fue llamada la Vulgata española.
Tradicionalmente es una edición clásica y fiel a los textos en un español elevado.

El precio de esta versión es elevado mismo en la edición personal y de bolsillo. Teniendo suerte se puede encontrar en lotes de libros usados o por Internet.

Monseñor Juan Straubinger




Mons. Juan Straubinger, el Jerónimo de Hispanoamérica.
Doctor Honoris Causa por La Universidad de Müenster, Alemania
Profesor de la Sagrada Escritura en el Seminario Mayor San José
de la Arquidiósesis de La Plata, Argentina

Una semblanza de la vida y obra del traductor.

Mons. Juan Straubinger será el autor de la primera traducción de la Biblia hecha en Argentina. Nació en Esenhausen, en Alemania, el 26 de diciembre de 1883. Por la situación que entonces sufría su patria, en 1938 viaja a la Argentina y se establece en la ciudad de Jujuy. Allí publica una «humilde hojita »[109] bíblica. Al año siguiente decide fundar la Revista Bíblica. En 1940 viaja a La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires, y se desempeña como profesor de Sagrada Escritura del Seminario Mayor. Permanece allí hasta 1951, enseñando diversas materias. Al parecer, luego retorna a Alemania, radicándo en la ciudad de Stuttgart. El Señor lo llama el 23 de marzo de 1956.

Una primera versión

Alternó sus labores docentes con una actualización crítica de la traducción al castellano de la Vulgata de Mons. Torres Amat. Mons. Juan Straubinger, entonces profesor de Sagrada Escritura en el Seminario Arquidiocesano San José de La Plata, publicaba, por la Librería e Imprenta Guadalupe, un Nuevo Testamento revisado y anotado. Era el año 1941. La obra tenía como especial particularidad que las numerosas glosas en bastardilla de la edición de Torres desaparecen en la edición de Straubinger, más ajustada a la Vulgata. El clérigo alemán siguió publicando la traducción de la Vulgata en una edición libre de las «viruelas », como llamaba graciosamente el padre Castellani[110] a las glosas en cursivas que llenan la edición de Torres Amat.

La traducción

En setiembre de 1944 aparecía una edición de los Evangelios, con 186 xilografías. La traducción, según el griego, le fue encargada a Straubinger con ocasión del IV Congreso Eucarístico Nacional Argentino. Llevaba prólogo del Cardenal Santiago L. Copello. Al año siguiente el autor tenía traducidos los Hechos. En 1947 salieron a la luz las Cartas de San Pablo. Un año después, terminada la traducción del Nuevo Testamento, se difundió en una edición completa.

Straubinger optó por traducir el Antiguo Testamento del texto hebreo masorético y de la Vulgata, lo que tenía terminado para 1951. La traducción de Mons. Straubinger ha sido varias veces reeditada en diversos lugares de América, incluso en una edición ecuménica de la Biblia, publicada en Chicago en 1971.

Características

La traducción del Nuevo Testamento y del Antiguo muestra una cierta influencia de la Vulgata, a la que el autor expresamente dice seguir para los libros veterotestamentarios que no se encuentran en hebreo. Para los demás libros del Antiguo Testamento sigue el texto masorético. Straubinger señala que ha tenido en cuenta las traducciones españolas de Nácar y Colunga, así como la de Bover y Cantera, publicadas en la Biblioteca de Autores Cristianos, de Madrid. Un juicio certero sobre la obra señala que: «El trabajo realizado con minuciosidad, refleja una buena crítica textual y una sólida exégesis. Desde el punto de vista estilístico el texto es correcto y claro»

cristiandad.net

19/1/13

Mons. Félix Torres Amat y su Biblia


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Nacido en Sallent (Barcelona) el 6 de Agosto de 1772, y muerto en Madrid, el 29 de diciembre de 1847. Hijo de José Torres y de Teresa Amat, y sobrino de Félix Amat. Sus padres lo enviaron a Alcalá de Henares (en donde su hermano Juan era colegial y capellán mayor) cuando tenía doce años. Allí estudió hebreo, griego y árabe, y más tarde francés e italiano. Después se trasladó a Tarragona, en donde se hallaba su tío Félix Amat, y allí estudió Filosofía y Teología, estudios que completó en San Isidro de Madrid, para finalmente doctorarse en Cervera en 1794.

Entre 1793 y 1805 se publicó en Madrid su obra Tratado de la Iglesia de Jesucristo. Luego volvió a Tarragona a enseñar Filosofía, Matemáticas, Teología y Sagradas Escrituras. Fue nombrado canónigo de la Colegiata de San Ildefonso el 5 de mayo de 1806. De un año después arranca el proyecto de nueva traducción de la Biblia, que le encomendaron tanto Carlos IV como Fernando VII. 

Se trasladó de nuevo a Madrid, pero en 1817, al ser nombrado canónigo sacristán y vicario general de Barcelona, tuvo que abandonar otra vez la capital. Publicó por aquel entonces Sucinta relación de las honras fúnebres [...] de María Isabel Francisca de Braganza (Barcelona, 1819) y Arte de vivir en paz (Barcelona, 1821), traducción-adaptación de Pierre Nicole que le había sido encargada por la duquesa de Medina Sidonia, de quien era capellán. Añadió en apéndice un Sermón de la paz, que ya había predicado en Barcelona en abril de 1817. En 1820 fue miembro de la Junta de Barcelona y de la de censura de la misma ciudad. Colaboró en el Periódico Universal de Ciencias, Literatura y Artes (Barcelona, 1821).

En 1823 salió la primera edición de su traducción de la Biblia, considerada por muchos la mejor que se ha publicado en España. La obra no es en todo de su autoria ya que se baso en los textos traducidos por el Padre José Miguel Petisco SJ. Aún así Félix Torres tenía la capacidad de hacer traducción y notas debido a su educación. 

En 1824 apareció incluido en el Índice el libro Observaciones pacíficas, de su tío Félix Amat, acusado de jansenismo.

En 1831 se retiró al monasterio de San Gerónimo de la Murtra, y su supuesto jansenismo no le impidió ser nombrado obispo de Astorga en 1835. Juró el cargo de senador por Barcelona el 5 de diciembre de 1837. En 1839, un año antes de su muerte, fue nombrado miembro de la comisión encargada de estudiar las relaciones de España con la Corte romana. Fue enterrado en el hospital de la Corona de Aragón, en Madrid.

Grabado de Félix Torres como obispo


La Biblia bajo su nombre se ha reeditado en los siglos XIX y XX. Todavía hoy sigue siendo impresa y leída. Entrado el siglo XX se reconoció a Petisco como la fuente primaria de la traducción y las nuevas ediciones han colocado su nombre en la portada de las nuevas ediciones.

Algunas de las características de su obra:

- Traducida directamente de la Biblia Vulgata Latina al Español teniendo delante los textos hebreo y griego.
- Las notas al pie de página y las introducciones son eruditas  Colocan las variantes de la Vulgata con los textos hebreo y griego.
- Dentro del texto bíblico aparecen parafrasis, añadidos por el traductor en letra inclinada (itálica) a fin de explicar mejor el sentido del texto, por estos añadidos se dijo que esta Biblia estaba llena de viruelas.
-También se le dijo que tenía viruelas porque algunas ediciones (La actualmente editada por Stampley es un ejemplo) porque el texto colocaba asteriscos (*) Para referirse a las notas al pie de página.
- El nombre de Dios aparece como "El Señor", según la tradición de la Vulgata "Dóminus" y de la Septuaginta "Kyrios". 
- Sigue la tradición católica de su época de leer el nombre de Dios en Hebreo como Jehovah, pero solo aparece en las paráfrasis  en las notas y en los párrafos que presentan un resumen al principio de cada capítulo. El nombre Jehovah aparece cerca de 20 veces.
- El nombre Adonai aparece 5 veces.
- La versión pastoral hecha en El Paso Texas en los años 30´s del siglo XX aumenta las referencias al nombre Jehováh en su edición. Esta edición ha sido la base para la revisión de la Biblia en la que estamos trabajando.

Se han hecho diversas reediciones de esta Biblia según las ediciones de los siglos XIX y XX. Si son del siglo XIX el texto esta en gramática castellana antigua, de difícil lectura para el lector moderno.

Se han hecho algunas revisiones gramaticales del texto. La principal fue hecha por Mons. Juan Straubinger revisando y actualizando el texto en base al hebreo y griego. Esta revisión no se popularizó mucho salvo en Argentina. Otras revisiones, no tan profundas como la de Straubinger, hicieron sus intentos. Entre ellos esta la del P. Robello CSSR en Colombia y la de Ed. Oceano en España.


La revisión que Straubinger hizo de la Torres Amat se editó en Argentina en 5 tomos