Para tener en cuenta a la hora de buscar una Biblia católica
Tomado de adelantelafe.com
El presente texto es básicamente autoría del P. Lucas Pardos de adelantelafe.com
Nuestra redacción ha hecho algunas comentarios extras. Nos parece importante tener en cuenta estos criterios en los momentos de crisis como los presentes.
- Intentar que sea lo más fiel posible a los originales hebreo, arameo y griego. Ante la dificultad que supone el desconocimiento de esas lenguas, acudir a alguna traducción que haya intentado esa fidelidad, aún a costa del estilo castellano elegante. Es el caso de la traducción de Cantera e Iglesias.
- Contrastar la traducción con la traducción oficial de la Iglesia Católica: Nova Vulgata o la Vulgata Clementina (Ambas estan disponibles en internet)
- Comprobar que tiene el nihil obstat y el imprimatur de la autoridad eclesiástica correspondiente. Últimamente se encuentran muchas traducciones que se dicen católicas sin las mismas.
- Evitar las traducciones ecuménicas, incluso cuando colaboran partes católicas. (Entre ellas esta la Dios Habla Hoy, la Biblia en lenguaje actual y la Biblia de Hispanoamérica)
- Rechazar las traducciones protestantes.
- Algunas buenas ediciones, sobre todo críticas, deben ser reservadas para especialistas. Las Biblias críticas son para estudio de los que están especializados en Sagradas Escrituras o abordan algún tema con seriedad, ni siquiera los protestantes usan en de común ediciones críticas.
- Comprobar pasajes claves y sus comentarios, que pueden ser fácilmente manipulados para “acercar’’ los textos a teologías rechazables como la protestante, las de la liberación (sobre todo en Sudamérica) o las de tipo Neo–Modernista:
- Los pasajes marianos.
- Los pasajes vinculados a los sacramentos.
- Los pasajes referentes al Primado de San Pedro.
- Textos sobre la justificación por la fe y las obras.
- El prólogo del Evangelio de San Juan.
- Los textos de la Resurrección del Señor.
- Textos re–interpretables en clave revolucionaria.
- Evitar las traducciones que buscan un lenguaje tan cercano al de la calle que resultan chabacanas y falsas.
Recomendación:
Ante la dificultad de encontrar una buena traducción, es aconsejable que se tengan a la vista varias buenas traducciones, para contrastar los versículos o pasajes que puedan ser dudosos. En particular, convendría tener a la vista, en un estudio sereno de la Biblia:
- La Nova Vulgata o la Vulgata Clementina (En latín)
- La Traducción de Cantera e Iglesias o la Bóver - Cantera (ediciones críticas)
- La Biblia de Navarra, basada en la Nova Vulgata
- Es conveniente alguna traducción más antigua, como las de Bover—Cantera; Nácar–Colunga (ed. Anterior a 1965); la de Straubinger. Sobre todo por las notas de tipo dogmático.
- La Biblia Americana San Jerónimo es la mejor traducción literal de la vulgata.
- Si tiene algún otro ejemplar y desea nuestra opinión, denos el título, autor y edición e intentaremos valorarla para usted. (Nota del P. Lucas Pardos no de nuestro blog)
Addendum:
Para aquellos que se manejen con la informática decirles que hay tres programas informáticos muy buenos para el estudio de la Biblia: Hay dos programas que están hechos por los protestantes, pero obviando las Biblias propias de ellos, hay también algunas Biblias católicas, aunque muy pocas en español. Los programas se llaman: Logos y Bibleworks. Ambos programas son de pago. Hay sin embargo un programa gratuito muy bueno que se llama e-sword. Desde el punto de vista informático es inferior, pero a su favor tiene que vienen incluidas Biblias en español muy buenas. Este programa tiene muchas Biblias, unas católicas y otras no, pero entre las católicas en español tienen: La Biblia Nácar-Colunga, edición del 1944 y la Biblia de Navarra que son excelentes. La Biblia de Nácar-Colunga (1944) es prácticamente imposible de encontrar, por lo que esta versión es un tesoro. En cuanto a la Biblia de Navarra, es fácil de encontrar, pero es un poco cara.
Tus opiniones van contrarias al magisterio. Revisa la enciclica Verbum Domini, donde se llama a promocionar biblias ecumenicas.
ResponderEliminarApoyamos el comentario del Padre Lucas. Y no esta en contra del magisterio porque el ecumenismo es para atraer a las personas a la fe no para alejarlas. Una Biblia ecuménica aceptable es la edición realizada en Chicago con el texto de Straubinger y al principio hay cuatro gruesos apartados con introducciones hechas por un biblita católico, por un ortodoxo, por un pastor valdense y por un rabino. Pero la traducción y las notas no TRAICIONABAN la verdad. Las nuevas versiones ecuméncas No tienen notas ni comentarios católicos a pesar de tener los deuterocanónicos.
EliminarDespués de estudiar el tema de la fidelidad de las traducciones he comprobado que no todas transvasan el mensaje que Dios entrega en los textos originales.
EliminarLa traducción, y esto lo digo como hablante fluido en algunas lenguas modernas y estudioso de otras antiguas, es un trabajo sumamente difícil porque se debe respetar la literalidad y a la vez transmitir el significado, es como escribir poesía sobre lineamientos de rima y métrica.
Hoy día hay muchas versiones que utilizan un vocabulario reducido al nivel del vulgo ignorante en vez de utilizar la riqueza del lenguaje para que el estudio y lectura de la Biblia sea un acicate para elevar el nivel cultural del lector.
Y es precisamente esta simplificación la que da pie a que se ofrezcan "interpretaciones" en vez de "traducciones", por supuesto que a gusto del grupo que patrocina la traducción.
Creo que las Biblias Ecuménicas pueden ser muy buenas referencias, pero para que sean aceptadas por los católicos debe haber participado algún erudito católico en su elaboración, sino ¿cómo se va a avalar un trabajo sobre el que no se ha participado y observado que se sigan los principios indispensables de fidelidad y exactitud?
No me parece correcto aprobar una Biblia Ecuménica sólo por el hecho que sea Ecuménica sin participación y supervisión sobre TODO EL TEXTO por parte de la Iglesia Católica.
El magisterio -no infalible en este caso- no promueve sino que tolera en bien de la unidad de los cristianos estas traducciones que deben siempre llevar el imprimatur. Pero la Tradicion constante de la Iglesia desaprueba esta practica -como se ve en las ediciones oficiales v.g. la de la Conferencia Episcopal Esp.- Tal vez en un fututo no muy lejano y a la vista de las funestas consecuencias, la Iglesia lo prohiba. Observese, ademas, la espantosa crisis que en estos momentos vive la Iglesia cuando algunos Cardenales han llegado a poner en duda el valor magisterial de algun documento del Papa actual. Terrible situacion.
EliminarValencia del Cid, 26 de diciembre del 2015.